Brasil se ha convertido en los últimos años en una de las principales economías mundiales. Un crecimiento económico sostenido a lo largo de la última década ha logrado que el país sea en 2011 la sexta mayor economía del planeta, con un PIB de 2,5 billones de dólares y unas políticas redistributivas que han conseguido incorporar a millones de brasileños al mercado.

Sin duda, Brasil está viviendo una transformación histórica. En los últimos años se está produciendo una transferencia de miembros de las clases sociales más desfavorecidas a las nuevas clases medias, con un mayor poder adquisitivo. En un mercado de alrededor de 200 millones de habitantes, esta transformación significa un universo de oportunidades para el exportador español y sus productos agroalimentarios.

El país destaca como un mercado especialmente favorable para la industria española de alimentación. Dentro de los mercados emergentes es el más cercano a España por su proximidad cultural e influjo de la inmigración portuguesa, española e italiana. Además de la facilidad de trato con los importadores brasileños, nuestros productos y parte de nuestros hábitos son conocidos por los consumidores brasileños.

Existen productos agroalimentarios españoles con fuerte presencia en Brasil, en especial el aceite y el vino. Y progresivamente comienzan a crecer las importaciones de jamón curado español, serrano e ibérico. Otros productos con todavía presencia escasa, y por tanto gran potencial de crecimiento, son el queso, las aceitunas, el vinagre, las conservas, los dulces, la cerveza y los alimentos de la gama gourmet.

Las exportaciones españolas totales a Brasil alcanzaron en 2011 los 2.584 millones de euros, un 17,34% más que en 2010. De ellos, 166,2 millones de euros corresponden a productos agroalimentarios y bebidas, lo que supone un incremento superior al 38% respecto el año anterior, año en el que se vendió por valor de 120,1 millones de euros.

Por sectores, encabezan el ranking de exportaciones a Brasil los productos hortofrutícolas que se situaron en 62 millones de euros, un 37,3% más que en 2010. A continuación, se sitúan los aceites que superaron los 52,7 millones de euros, con un crecimiento del 17% y los vinos que alcanzaron los 13 millones de euros, un 31,9% más que el año anterior.

Más información: Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

Fuente: Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).