Tu "Imagen de Marca", no es la que tú quisieras proyectar sino, la que el mercado percibe de tu negocio; cómo las personas perciben tu empresa, producto o servicio y, para ayudar a ello, te proponemos que construyas tu "Identidad Corporativa", identificando y atendiendo todos los detalles necesarios para conseguir el esperado equilibrio y coherencia entre lo que proyectas y la percepción de tu mercado objetivo.

Hablamos de Identidad Corporativa cuando planificamos cómo cuidar al máximo todos esos detalles que mencionamos, que incluirán no sólo la información estática, sino la interactuación con el entorno. Hay negocios que llevan este asunto hasta la máxima expresión y, para garantizar unos mínimos comunes denominadores, tratan de protocolizar y procedimentar el mayor número de cuestiones posible, creando para ello un "manual de identidad corporativa", afín a la filosofía de la imagen social o empresarial que quieren trasladar.

El manual corporativo establece líneas maestras que ayudan a:

-Construir la "personalidad corporativa".

-Definir la cultura empresarial que se desea seguir y trasladar.

-Identificar claramente nuestras fortalezas y trabajar las oportunidades.

-Informar de nuestro valor y valores, generando opiniones favorables.

-Reforzar el espíritu de pertenencia del equipo de trabajo.

-Alinear a las personas de tu negocio en torno a objetivos comunes.

-Ofrecer una adecuada imagen ante los accionistas y prescriptores.

-Perseguir y mantener el liderazgo en nuestro ámbito o sector.

-Impulsar la creación de nuevos proyectos, productos y servicios.

-Complementar nuestros esfuerzos en publicidad.

Un buen manual corporativo puede ser fruto y resumen de una estrategia corporativa o, incluso al revés, el primer paso para establecerla si no la hay: la estrategia corporativa es un documento convenientemente trabajado por la dirección de un negocio que va a perseguir alcanzar mayores o mejores objetivos de forma enfocada, alineada y organizada a través de un proceso de acciones orientadas a metas generales y concretas, alcanzables y coherentes, medibles y, por lo tanto, gerenciables.

Y toda estrategia corporativa, contará con un Plan de Acciones, instrumento que va a facilitar los caminos hacia la consecución de las diferentes metas y objetivos, asignadas a cada persona de nuestro equipo, que habrán sido identificados y consensuados de forma clara y realista.

Más información: Euskadi Emprende.

Fuente: Euskadi Emprende.